3 cosas que rompen la estética de tu salón minimalista

Uno de los artículos más leídos en el blog (si no estás suscrito, este es buen momento para hacerlo) es aquel en el que desentrañábamos las claves para dar vida al salón de estilo contemporáneo, igual que aquel otro que trataba sobre qué alfombra colocar en tu salón moderno. Siguiendo esa estela, hoy nos adentramos en un tercer estilo de salones: los minimalistas.

Si te interesa este estilo te invitamos a que descubras sus claves más detalladamente. A modo de resumen, te diremos que sus características más relevantes son la predilección por los tonos neutros, las líneas limpias y simples, y la ausencia de cualquier elemento superfluo.

Puede que incluso teniendo muy claras sus bases, no consigas darle ese efecto a tu salón. La mayoría de las veces el motivo es muy sencillo: en él todavía quedan ciertos elementos que “chirrían” ante la sobriedad del minimalismo. ¿Quieres saber cuáles son?

Un exceso de objetos decorativos

Algunas pequeñas piezas de decoración añaden personalidad al salón (aquí tienes los imprescindibles), pero muchas consiguen el efecto contrario y muestran una estancia desordenada y caótica. Utiliza trucos de experto para colocarlos con estilo, como por ejemplo presentarlas en disposición triangular con piezas de distinta altura.

Del mismo modo, en vez de muchos jarrones, escoge uno más importante y de mayor calidad. Las obras de arte también suman puntos, bien sea en forma de escultura o de cuadro. Estos últimos, mejor en gran formato para dar profundidad y carisma a la estancia sin transmitir sensación de desorden. Menos es más.

Evidentemente, en un salón real se acumulan documentos, revistas, cables y otros objetos que no queremos tener a la vista para no romper la armonía decorativa. Para ello necesitas encontrar soluciones de almacenamiento como mesas de centro con cajones, estanterías con armarios o baúles. De hecho, no tener ninguno de estos muebles, es uno de los 4 errores que harán que tu salón parezca desordenado incluso aunque no lo esté.

Aparatos que ya no utilizas o no funcionan

La televisión es uno de los mayores escollos para el salón minimalista. Y es que no suelen ser de lo más estéticas, aunque es verdad que cada vez menos. Procura esconder las consolas, los cables, los mandos y todo aquello que produzca ruido visual. Y con más motivo en el caso de que ya no los utilices. Si utilizas CD o DVD puedes utilizar un mueble para TV con espacio pensado específicamente para ellos.

Una buena manera de saber de qué puedes desprenderte, es hacer inventario de lo que realmente utilizas. Muchas veces, la inercia es la responsable de que las cosas sigan ahí: es la fuerza de la costumbre.

Repite este mantra: si hay algo que ya no te gusta, es mejor que te deshagas de él. Dónalo, regálalo o dale una segunda vida, pero que no ocupe un espacio en tu salón minimalista si no te aporta felicidad.

Demasiadas lámparas

Y en tercer y último lugar, hablaríamos de la iluminación. Aunque una iluminación adecuada es esencial para un salón minimalista, un exceso de lámparas puede crear el efecto contrario. Elimina todas aquellas que no contribuyan a conseguir el estilo que quieres. Lo ideal es ubicarlas estratégicamente y se encuentran bien integradas en techo y/o pared.

Ahora que ya tienes claro cuáles son los objetos a los que debes decir adiós para conseguir tu salón minimalista, es el momento de que visites nuestras instalaciones y renueves tu salón. ¿Cuándo? De lunes a sábado de 10.00 a 13.30 h y de 16.30 a 20.30 h. Además de financiación hasta 12 meses sin intereses, recuerda que los servicios de transporte, montaje, servicio de decoración, diseño 3D y gafas virtuales son gratuitos para nuestros clientes.

También nos encontrarás en las distintas redes sociales como Facebook (¡ya somos más de de 70.000!), Instagram (¡hemos superado los 20.000!), Twitter, Pinterest y Google My Business. ¡Gracias por estar ahí!