El verano es más que una estación. En cuanto notamos su presencia, estamos más alegres, con más ganas de hacer cosas y, sobre todo, de disfrutar de las vacaciones. Por eso, es muy buena idea trasladar esa sensación a la decoración de tu salón, ¡estarás tan a gusto como si ya estuvieras de relajación total! ¿Cómo crear ese oasis personal con vibraciones veraniegas sin complicarte la vida? Pues aquí tienes unos consejos que te vendrán de perlas. ¡Toma nota!
Primero, los pasos previos
Antes de entrar en materia, te recordamos que para dar la bienvenida al verano, es preciso despedir la primavera en condiciones. ¿Cómo? Con una puesta a punto en la que tendrás que limpiar las alfombras, las cortinas y la ropa de cama.
Antes de hacerlo asegúrate de leer bien las etiquetas con las recomendaciones del fabricante. Sin alfombras es probable que el espacio se perciba más fresco, pero quizá también algo impersonal. Escoge modelos más finos para seguir disfrutando de ellas en la nueva estación.
El dúo triunfador
Empecemos por la gama de colores más asociada al verano. ¿Te imaginas cuál puede ser? ¡Exacto! Beis y azul, o lo que es lo mismo, arena y mar. Una combinación fresca, elegante y serena que te trasladará de inmediato a una idílica playa. Si en tu salón predominan los tonos neutros, no te costará nada incorporar unos cojines en tono azul, o incluso un bonito jarrón transparente en ese color ¡parecerá el mismísimo mar!
Pero el azul no es el único tono que transmite un día de playa. Otros colores como el amarillo, el naranja, el verde y el rojo, también hacen que nos sintamos pletóricos y radiantes.
Los elementos adecuados
Echa un vistazo a todo lo que tengas en casa con cierto aire marino y piensa cómo ubicarlo en el salón. Puede que tengas caracolas o piezas de menaje con algún motivo como anclas, barcos o nudos marineros en los que no habías caído. Puedes agrupar varias piezas en una bonita bandeja y ponerla en la mesa de centro junto a un jarrón azul. ¿Lo visualizas?
Menos es más
Decorar un salón con un toque veraniego no significa que tenga que rezumar estilo costero por los cuatro costados. Si eres firme defensor del estilo minimalista y te gusta lo exótico, puedes agregar hojas verdes y grandes como si estuvieras en el trópico. ¡La mejor manera de llevar la naturaleza y el aire libre al interior! Un marco con una lámina selvática también funcionaría muy bien ya que las palmeras son un elemento básico de la decoración tropical: basta con un mínimo para contagiarte del estilo tropical.
Por su parte, las rayas azules y blancas, a veces con un toque de rojo, evocan sensaciones de la vida en el mar. Consigue esas vibraciones marítimas con unos textiles con ese estampado ¡y ya verás que triunfo!
Un ambiente isleño
Telas de yute, vegetación típica de gran tamaño, texturas de madera, crochet, tonos azules y paredes blancas brillantes, son algunas de las claves de ese ambiente con sabor a isla que tan relajante nos parece. Un paraíso sin salir de la ciudad.
Otro elemento clásico de las casas de playa son las lamas de madera en blanco, ya sea en paredes, techo o muebles. Tenlo en cuenta.
Los deportes náuticos
Tablas de surf, lanchas, barcos o esquí náutico y todos sus complementos serán bien recibidos en tu salón de decoración veraniega. Imágenes de idílicos pueblos de pescadores con casas de colores, o estampas de playas con casetas de telas a rayas también son un buen reclamo como elemento decorativo.
Antes de despedirnos te recordamos también las 5 cosas a las que tienes que decir adiós hasta la nueva temporada sí o sí: cojines de terciopelo, mantas de cuadros escocesas, alfombras de pelo largo, las piñas y el dorado.
¿Preparado para darle un toque veraniego a tu salón? Te esperamos en nuestras instalaciones hoy mismo. Nuestro horario es de lunes a sábado de 10.00 a 13.30 h y de 16.30 a 20.30 h. También nos encontrarás en nuestras redes sociales como Facebook, Instagram, Twitter, Pinterest y Google My Business. Gracias y ¡disfruta del verano!