Hace nada le ayudaste a dar sus primeros pasos y hoy ya quiere diseñar su propia habitación… ¡tu retoño se ha hecho mayor!
Con el paso del tiempo, niñas y niños necesitan habitar un espacio donde poder estudiar, descansar, cultivar sus aficiones, disfrutar con sus amigos y, sobre todo, soñar.
Si te encuentras en esta situación, los siguientes consejos te serán de gran ayuda. Ten presente también la importancia de hacerles partícipes en el proceso de elección de su dormitorio. Escucharles y hacerles ver que tenemos en cuenta su opinión es vital tanto para su autoestima como para asegurarte el éxito (y evitar decepciones). Al fin y al cabo son sus dominios.
1. Una buena iluminación
Aunque lo deseable es contar con unos grandes ventanales por los que entre la luz natural, esto no siempre es posible. Pero tranquilo, con cierta pericia podrás aprovechar el potencial de la habitación para que resulte luminosa. Utilizar el blanco o tonos claros como color base para el mobiliario y, sobre todo, en estores y cortinas será tu mejor opción.
En cuanto a la luz artificial, será necesario colocar varios puntos de luz determinados por las distintas actividades que se vayan a realizar, nosotros nos encargamos de todo. Nunca se pierte un punto de luz o enchufes que se tengan en la pared.
- Una buena lámpara de techo.
- Un flexo para la zona de escritorio.
- Una lamparita para la mesilla de noche (o una de pared en caso de no tener mesilla).
A la hora de determinar la posición de los muebles, piensa que lo deseable es que la luz natural esté frente al escritorio o, en su caso, entre por la izquierda para los diestros y viceversa para los zurdos. De esta manera, se evitarán las sombras.
2. Mobiliario cómodo y funcional
Cuando pensamos en amueblar la habitación de los niños, los diseños modulares suelen ser una de las opciones más interesantes. Este tipo de muebles se adaptan a su crecimiento, optimizan el espacio y favorecen el orden gracias a sus numerosos cajones, estanterías y altillos preparados para conservar todas sus pertenencias.
Contar con un buen espacio de almacenamiento va a permitir que sea responsable de todas sus cosas, además de liberar de esta tarea al resto de la casa (ideal si no te sobra espacio). Las prendas de abrigo, la ropa de otras temporadas, los zapatos, la bolsa de deporte, las mochilas, los bolsos… ¡cuántas cosas! Bien colocadas todas tendrán cabida en su habitación y esto repercutirá en la buena organización del día a día.
Por otro lado, este tipo de muebles cuenta con distintos acabados y precios. ¿Necesitas asesoramiento? Ven a visitarnos y te mostraremos las distintas soluciones para cualquier medida de habitación. También hacemos diseños en 3D tomando las medidas reales de la habitación en la vivienda de nuestro cliente, de ésta manera se podrá comprobar perfectamente cómo va a quedar la habitación. ¡Qué ganas!
3. Una zona de estudio bien definida
El estudio requiere concentración y tranquilidad. Para ello es indispensable contar con un espacio cómodo y adecuado. Estudiar en la cama o en el suelo como hacen algunos termina por pasar factura, especialmente a la espalda.
La habitación juvenil debe tener una mesa lo suficientemente amplia que le permita tener lo necesario a mano mientras está estudiando, así como unos cajones para guardarlo todo cuando haya terminado. La silla debe ser ergonómica (ideal probarla antes).
Además, como probablemente utilice un ordenador, también tienes que contar con este espacio extra al igual que con una regleta donde poder cargarlo.
Un corcho donde poner horarios y sus fotos preferidas también le ayudará a sentirse más a gusto.
4. Espacio para dos
¿Tus hijos comparten dormitorio? En esta situación es todavía más importante que cada niño tenga una zona que pueda personalizar con sus cosas. Alternar paredes de distintos colores dará una mayor profundidad visual a la vez que les permitirá crear esas zonas diferenciadoras.
En los últimos años, la cama compacta se ha convertido en una de las más populares ya que, además de contar con dos camas, también dispone de una fila de cajones grandes. Este modelo de cama es perfecto tanto para una situación permanente como para una circunstancial (la visita de un familiar o un amigo).
Las literas o camas tipo tren son otra de las posibilidades. ¿Su principal ventaja? Siempre están listas para utilizarse sin tener que sacarlas y guardarlas cada día.
Por último, además de luminosa, cómoda, con espacio de almacenaje y mucho carácter personal, una habitación juvenil ha de ser cálida y acogedora. Colocar una buena alfombra en el espacio libre es la manera más sencilla de lograrlo. Procura elegir un modelo de fácil limpieza para mantener a raya el polvo y los ácaros.
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